CALIDO Y FRIO
El jueves, casualmente te encontré y, por primera vez en no se cuanto tiempo , platicamos largo rato de manera tan amena que me hiciste recordar por qué te quise tanto, me hiciste reír. No me dijiste nada respecto a “nosotros”, sólo volteaste hacia mi mano izquierda y tocando uno de mis dedos dijiste "¿Hace cuánto que te dí este anillo?” Me sonreí y contesté que hace como 8 años, tu solo asentiste con la cabeza, y sin oportunidad a que agregaras algo te dije que aún lo llevaba porque me gustaba y porque ya me había acostumbrado a él, tu sólo sonreíste..…Ese día nos despedimos sin saber cuando nos volveríamos a encontrar….
Ayer que entré a la clínica iba con el corazón en la boca, las razones: una por no saber como reaccionaría tu familia ante mi presencia y dos porque simple y sencillamente no daba crédito a lo que sucedía y sentía una terrible angustia por el hecho de pensar que estabas ahí gravemente….
Al verme tu mamá lloró, cosa que me desmoronó (como siempre me has dicho “soy tan llorona que no soporto ver a alguien hacerlo pues en cuestión de segundos me pongo a llorar también”). Tu hermana me explicó lo sucedido y me dijo que de momento no te podía ver, pero que haría todo lo posible para que me permitieran hacerlo aunque fuera un momento.
Se que no hemos tenido la relación mas maravillosa del mundo, reconozco que nos hemos ofendido sin compasión, pero al verte ahí, acostado, lastimado, dependiendo de esas horribles sondas, sentí que agarraron mi corazón y lo apretaron tan fuerte que creí que iba a caer antes de llegar a tu lado.
Me senté junto a ti, no me pudiste ver, sólo espero que hayas sentido mi presencia.
La enfermera me dijo que no llorara, que te platicara algo bonito, pues está segura de que me escuchas.
así lo dijo Pame a las 10:20 AM |
<< Home