Siempre he dicho que para mí, mi blog, es un ejercicio mental, me gusta poner a trabajar mi mente, y creo que nadie puede negar que para hacer un post, por más bobo o culturoso que sea, pones a trabajar a las pocas o muchas neuronas que tengas en la cabeza.

También comparto la idea de que de su blog cada quien haga un papalote y por tal que cada quien escriba lo que le venga en gana. Y hoy, yo me desahogaré….

En realidad, en los últimos días me he sentido bastante abrumada y estresada por mi trabajo, la razón: simplemente las cosas no van bien.

Hay muchos errores que igual y no empiezan en mi área (contabilidad) pero a final de cuentas todo, absolutamente todo, aquí recae, sumándole además los errores que también y no está por demás decir, su servidora comete.

Uno de mis múltiples defectos, es que cuando las cosas se me salen de “control” mi impotencia se convierte en sentimiento y éste a su vez en llanto.

El llanto nubla mi visión y no me permite tomar decisiones adecuadas. Pero simplemente es algo que no puedo controlar. Me da frustración conmigo misma el no controlar las cosas.

Me voy a ir y aún quedan muchos pendientes por resolver.

Al exponer a dirección esto su respuesta fue el cuestionamiento de que si me siento incapaz de llevar mi puesto, mi repuesta fue en el momento un rotundo no.

Me hace sentir mal que se ponga en tela de juicio lo anterior, como se me dijo, y con bastante razón, tengo muchas responsabilidades y por lo regular las llevo bien, pero a la hora de tomar una decisión en cuestión de minutos, me falla y de la manera mas fea.

Como sea, ya me cumplí mi cometido, el desahogarme y ahí los dejo, que tengan excelente día (lo que resta).